martes, 6 de febrero de 2018

El Arte de Vivir 63

El Arte de Vivir  63
El arte de vivir y el optimismo existencial.
 Como todo arte, el arte de vivir es terreno de  naturales divergencias.
En contraste con la ciencias ”duras”, la técnica, la señalética, la gramática y gran parte del sentido común, la filosofía, la educación, la psicología, la educación, la política, la espiritualidad, el arte… tienen dimensiones y temas muy abiertos a  divergencias, a veces bien profundas.
En el arte de vivir, por cierto que se dan convergencias. Hay datos  objetivos, hay dominios indiscutibles  de la ciencia y de la lógica. No obstante, existen legítimas  diferencias en terrenos básicos, subjetivos.
Uno de ellos dice relación con la gran expectativa  sobre el sentido. Se separan pesimistas, escépticos, indiferentes,  optimistas…
 El tema pesimismo-optimismo es crucial. Invita, exige, exponer los sesgos.
Los nuestros  han sido buen explícitos.  Son el énfasis  en la gratitud propia de seres finitos,  concientes,en condiciones de ser mínimos co creadores, exigidos a abordar sin complejos la complejidad… Llamados a integrar la dimensión poética de la existencia, haciéndola entrar por la puerta principal,junto al asombro y al valor  de la amistad, admirando la razón, pero reconociendo  sus límites, asumiendo el misterio del ser y el misterio del yo, viviendo el sentimiento mágico de la vida.
Esperanza  inseparable   del coraje de ser, de la miitancia en la vida,del compromiso con la dignidad y los derechos humanos.
Todo ello,  tiene un gran diagnóstico, a veces   descalificador: el optimismo.Detrás de ello,  una sospecha frecuente: la ingenuidad.
Sí,sentimiento magico, optimismo existencial, esperanza y… compromiso y certeza de que estamos en una crisis  en que se juega la continuidad de la vida.