Boletín Esperanza 14, tercera parte
La Alegremia, la Amistosofía y
la Esperanza
Luis
Weinstein
El fantasma de la
humanización y la utopía concreta de la
reevolución.
Un
fantasma recorre un mundo donde
parece andar, con prisa inaudita, la
densa realidad del consumo, el poder y el deslumbramiento por las innovaciones tecnológicas.
Es
el fantasma de una nueva mirada y una nueva forma de vivir, convivir y
apreciar la existencia.
Es
el fantasma y es la realidad del Cuidado ,del Coraje de Ser, de la Alegría, de
la Amistad.
Es la Esperanza encarnada en la acción de grupos, redes ,
sensibilidades, que liuchan por la paz, que optan por la democracia profunda,
que no confunden la globalización y la acumulación del dinero con el espíritu
planetario, con la militancia en la vida; que trabajan por desarrollar lo más
humano de los humanos.
Es
el fantasma de la transformación, la del intervenir en la evolución, del asumir el paradigma de la coexistencia
activa, de la integración, de la
complejidad, de la salud integral, de la educación integral, de los derechos
y responsabilidades integrales, de la
integración de la ecología ambiental, la social, la subjetiva, la del yo…la del
desarrollo de lo más humano de lo
humano.
El
fantasma de hacerse cargo de nuestra
identidad como especie, de seres
finitos con vocación por cooperar con la
vida, de especie que vive el cuidado.
El
fantasma del llegar al yo-tú, al diálogo
de confianza en la coexistencia, en el ser iguales y diferentes, en el
encontrarse y complementarse.
El
fantasma de la amistad profunda, de
la
amistad multidimensional, de la
amistosofía El fantasma del cuidado y de la alegría-
Es
una inquietud, es un anhelo que empieza a
vislumbrarse porque cada vez son
más quienes buscan, quienes
empiezan a caminar, muy resueltos
o a tientas, por sendas de cambio,
a través de la ciencia o la
filosofía, de la espiritualidad, lo poético o la acción social.
Hay
quienes han llegado a la conciencia y la
práctica de una misión: trabajar por
hacerse dignos de la condición humana,
por su desarrollo y por favorecer el desarrollo de otros, por
asumir la misión de contribuir a cambiar
el paradigma vigente. Por llevar los anhelos, los sueños, a la realidad.
Por
la esperanza proyectada a la defensa del planeta, de la vida, de la
contribución, agradecida, a la humanización
conciente de su pertenencia a la
vida y al ser.
La
tarea incluye el aceptar que se trata, por ahora. del compromiso de
una minoría avanzada, crítica,
realizadora y propositiva.
Una
minoría con trayectorias y presentes muy diversos.
Una
minoría que debe enfrentar
la realidad de que el sentido común dominante sigue siendo
otro, individualista, de miras estrechas. Incluso, en parte, en los cercanos,
Incluso, en cierto grado, en quienes
dedican su vida al cambio de vida
y de la conciencia.
En la resistencia alemana en
tiempos del nazismo se repetía una
palabra de un texto de Rilke: resistir.
Ese resistir se llama, hoy , de diversas maneras Una de
ellas , una forma de resiliencia, es dialogar.
Dialogar
dentro de cada persona, con las
relaciones
significativas,
con las personas agrupaciones y tendencias cercanas .Y con las que no son tanto.
Dialogar,
es decir, llevar a la práctica el
nuevo paradigma, aquí y ahora .
Dialogar,
ir haciendo difusas las fronteras dentro y fuera de la minoría, muy diversa, que cree,crea y
vive desde las perspectiva que está en los anhelos de muchos.
La perspectiva que todavía es un fantasma.
Dialogar con coraje y alegría.
Dialogar
para aprender y para defender la vida.
Dialogar como parte de la necesario
revolución que retome el camino de la
evolución.
Dialogar
para que el fantasma de la humanización,
siga hacéndose realidad.
EL PLANETA DE LA ESPERANZA 13
Luis Weinstein
Una vez soñé con unos jardines en el
planeta de la Esperanza, dijo Antonio (el Principito).
De eso se trata, contestó Esperanza, aquí unos cierra los
ojos y, según como uno sea, juntando el momento y las posibilidades, aparecen
plazas, montañas, mundos subterráneos , jardines …
Bien distinto a mi País de las Maravillas… adujo Alicia.
Me vino el color
azul, muy azul y…el Asombro, expresó Antonio, todavía con los ojos cerrados ,l
o veo con todos nosotros…
Qué alegría, este es
un jardín compartido con el color azul
, se escuchó a una voz sentida como propia por cada uno delo seres
presentes ,no me canso de agradecer a Esperanza
por facilitarme esta vía de entrada tan significativa.
En ese instante, estaban ya en el Jardín del Asombro y el
color Azul junto a Antonio, el convocante, la Rosa, el Zorro, Alicia, el Conejo
Blanco, la Gata, Alegría, Amistad, Esperanza, el Sentido, el Cuidado, los
anfitriones, dueños de…el jardín , Azul y Asombro.
Bienvenidas y
bienvenidos, dijo el Color Azul.
Azul se presentará
con una de sus personalidades, expresó Asombro.
Acto seguido cada uno, Alicia, Antonio y sus amigos, se
vieron viviendo un momento significativo de su existencia, mientras Alegria,
Amistad, Asombro, Cuidado, Sentido y Esperanza tomaban parte como actores
representando planos de las vivencias de los visitantes.
Con los ojos húmedos, empezaron a compartir sus vivencias.
Asombro escribió algo en un papel que no mostro a los
visitantes y se lo entregó discretamente
al Cuidado.
A ver, dijo el Cuidado, disculpándose por intervenir,
escriban con dos palabras lo qué vivieron
en esta experiencia y se lo
entregan a Amistad.
Amistad va leyendo: la Rosa dice ¡un encuentro! El Conejo
Blanco: un “encuentro”, Antonio: “Vaya encuentro”….Sigue tu Alegría, estoy
emocionado.
Alegría lee “el Zorro: encuentro domesticado…” Alicia:
encuentro maravilloso…”
Cuidado mostró el papel escrito por Asombro. Tenía una sóla
palabra: Encuentro.
Sentido verbalizó lo vivido: Es un rostro del Jardín del
Asombro y el color Azul. ES el encuentro profundo del yo y el tú. Es una
alternativa posible de vivir en el Planeta de la Esperanza.