Cnversando desde la Amistad
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Poesía y
ecología
E l Cuidado ( 9 )
El ciuidado a la escala humana incluye las relaciones con los otros seres
vivos, entre ellos, con los arboles
Escribe María Alicia Pino , Poeta.
Carta sobre los árboles
Al bosque de quienes quieren a los árboles y los
están cuidando
Coincidimos en amar a los
árboles- Deseo dialogar sobre ese
amor.
Lo cierto es que no es de esos amores comunes, esos en donde uno busca
completarse pensando en una rara incompletud; como si Dios/Vida se hubiese
quedado dormido en la mitad de su creación, como si hubiese pegado un pestañazo
y además del ombligo dejó un huequito mayor. No, no es de esos amores. Tampoco
es de esos en donde la necesidad de reciprocidad nos obliga al cobro permanente
del amor. No no es de esos tampoco. Y para qué decir de aquellos que nos
encierran en romanticismos estériles, aburridos, sin sentido, que nos quitan el
aire y la luz. Por ningún motivo. Nada de eso es mi amor.
Porque quizás ni siquiera cabe en la categoría de amor consensuado. Mi
amor a los árboles es muy sencillo: los siento vivos.
Por eso el día en que la municipalidad de Ñuñoa envió a sus funcionarios
a cortar las eternas ramas que caían como manantial sobre las veredas de Dublé
Almeyda, no pude más que ponerme en el medio del patíbulo y tratar de entender
sus razones: Por solicitud de nuestro administrador, cortaban las ramas que
días atrás, cuando un temporal extraordinario las hizo bailar como enardecidas,
habían dejado caer una de ellas sobre la esquina del jardín del condominio. Su
diagnóstico fue que representaban un peligro para los vecinos.
Una sola había caído, y bastó para que una gigantesca mano de hacha
mutilara los brazos de tan bellos amigos. Entonces me pregunté: ¿dónde dormirán
los pájaros? ¿cómo subirá la hormiga hasta la cumbre del cielo? ¿cómo
caminaremos sobre el asfalto cuando el sol explote sobre nosotros? Hoy
parecen niñitos formados en el acto del lunes, de esos antiguos en donde
cantábamos la canción nacional "completa" como decían, con segunda
estrofa marcial.
Y no son sólo las arboledas de Ñuñoa las que van quedando vacías; la
mano de hacha asoló también Providencia y sus árboles de Pedro de
Valdivia.
Por esto y todo lo que no menciono es que quiero hablar contigo. Por un
lado para saber cuál es el límite en la poda. ¿Existe legislación al
respecto?
Si los árboles representan un riesgo para la seguridad de los
transeúntes, ¿debería existir un informe que corrobore ese diagnóstico? ¿los
municipios son dueños de los árboles (como lo manifestaba la funcionaria a
cargo Ing. Agrónoma, Marcela Orellana, en el dpto de medio ambiente del alcalde
Sabat; copio: Como
indica la Ordenanza nº 6, en el artículo 2 “todos los árboles y especies
vegetales que se encuentren en la vía pública, se considerarán de propiedad
municipal".
Personalmente creo y confío en la buena voluntad de aquellos que dicen
proteger-nos.
Creo y confío en que creen y confían en que lo están haciendo
correctamente.
Creo y confío en que el día en que los sientan vivos, como lo saben las
aves y las minúsculas hormigas caminantes de sus troncos, ese día, ese mismo
día, no abrirán las carpetas municipales para sentenciar-se a ellos mismos.
Creo y confío en que sus ramas crecerán cuidadas y amorosas el día en que
logremos sembrar también el amor hacia ellos.
Amigas y amigos :¿Tendrán
unos minutitos para sentir, pensar
, dialogar, actuar en defensa en
promociónn, en amistad con los arboles?
A quienes se interesen, les pido que me escriban (mariaaliciapino@yahoo.es)
para adjuntarles fotos de
un antes y un después de los árboles de Dublé Almeyda.
un
cariñoso saludo
María Alicia Pino Pozo
(Malicia; Poeta y Comunicadora Social)
