domingo, 31 de agosto de 2014

La Dimensión Poética de la Vida (37)


La Dimensión Poética de la Vida (37)
 Alicia, Antonio y sus amigos en le País de la Amistad

Alicia en la “silla tibia” en una dinámica de grupo
 Higia se acercó al grupo formado por Reflexión, Intuición  e Imaginación . Cambiaron  pocas palabras. Luego, ella tomó la palabra ante  el conjunto de los asistente , que ya estaba expectante.
Ustedes deben de haber participado en grupos de  desarrollo personal  , dijo Higia , dirigiéndose especialmente a Alicia y Antonio.
No sé si era eso, contestó Alicia , pero  el grupo con que me  encontré  fue para mí una tremenda experiencia de desarrollo personal…Qué irás sedimentando , expresó la tortuga,  con un dejo de pedantería. Como era de esperar, la Reina  de Corazón solicitó que  a la tortuga se le  cortara la cabeza ...y nadie se inmutó.
 Siento que siempre he estado con personas , o grupos , que a uno lo desarrollan, opinó Antonio. ¿Nosotros formamos un grupo con el baobab y la rata,? preguntó la Rosa, con suave tono irónico.   Antonio alcanzó a  sonreír , pero antes que hablara,  Inspiración   exclamó, todo está dado para  jugar  a la silla tibia ,  juguémoslo simple : a una persona, por turno,  se le hacen preguntas.
Asombro  abrió  ampliamente los ojos .Apolo  propuso , mesurado , como  pregunta, si ella está de acuerdo, si ha tenido  una experiencia que   ella siente  que la  ha hecho crecer… Fuera  de nuestro   sueño, arguyó el conejo blanco. Y  de la estadía con nosotros , sugirió  Imaginación.

Alicia  asintió  , complacida de no tener que rememorar ese sueño  en que todo cambiaba , hasta y bien significativamente, su estatura.
 Con voz al principio apenas audible, vacilante , entrecortada,   la joven empezó  a hablar.

Con  Antonio  habíamos  visitado el planeta de la Amistad .  Tuve una experiencia muy  fuerte de contraste con el planeta de Antonio. Tenía una inquietud  importante sobre el poder…sobre la magnitud de todo De alguna mantera ,  una experiencia  al respecto  cambió mi vida . Se la conté  a Antonio y …me pidió que la transcribiera  al zorro .
 Sí.  dijo el zorro   y yo se lo agradezco a los dos.
 Me permito leer. Así  me sale  más fácil, como   en el  colegio, dijo Alicia.

Alicia leyó este textp

Alicia de regreso  a la Tierra, después  de la visita al Planeta de la Amistad.

Era tarde, pero su habitación se encontraba muy iluminada por  una luna llena muy segura de sí misma, casi oronda.

Alicia  se quedó pensando en la amistad, algo tan cercano, pero  , ahora, después de la visita a ese planeta tan imposible   de separar   de una realidad de más posibilidades, semejante a   ese sueño decisivo de su  infancia donde    se perdieron tantos límites y se ganaron tantas posibilidades   de ser, de  relaciones, de integración de  mundos.

 Recordó: el planeta de Antonio es demasiado pequeño para   quedarse a dormir allí … 
Se hacía la pregunta:  debía ser así, no podría    ser como el planeta de la amistad, no era ya un planeta   de la amistad, pequeño, pero   de verdad, de mucha verdad… y si se pudiera hacerlo crecer como le pasó a ella en su gran sueño
 ¿ El planeta de Antonio podría crecer, qué absurdo:    beber algo  para  aumentar de tamaño…?Sintió una conocida   debilidad, perdió relación con ella misma, se durmió.

Soñó, recordó. Era el tiempo del colegio.
Soñó que soñaba y luego despertaba en pleno pasado .El gato de Cheshire La sonrisa  indeleble…La mirada…
 Alicia devolvió una mirada de entendimiento a la sonrisa del gato, a medida que ésta se retiraba hacia un mundo algo más verdadero que el compartido con todos nosotros.

Alicia interrumpió la lectura
Algo   recordaste, le dijo Mnemosine
Si, me distraje, expresó Alicia, evasiva
Tomemos un jugo y, luego, seguimos, propuso Apolo, con la aprobación general…y el agradecimiento de Alicia.