domingo, 20 de mayo de 2012

Conversando sobre la Amistad(229)


Conversando sobre la Amistad (229)
La amistad es una forma  de coexistencia vivida, intencionada, muy valorada, estrechamente relacionada con lo que le da sentido  a la existencia y a la coexistencia , a que  en la coexistencia le de sentido a la existencia
Nos da una  gran alegría recibir y presentar esta colaboración de  nuestro amigo Patricio Alarcón, psicólogo y educador, director de la Escuela de Medicina Natural Integrativa, de la Universidad Pedro de Valdivia. Autor de un libro sobre la Coexistencia.

SOBRE LA AMISTAD COEXISTENCIAL
Patricio Alarcón

Una amistad coexistencial es un vínculo liberador que pone un ser frente  al otro ser, en el acto simultáneo de ofrecerlo a la coexistencia con el todo.

La amistad en el aquí y el ahora, se experimenta con el mayor gozo, como el mejor momento, donde concurren el goces estéticos, cósmicos y del amor pleno.

Desaparece la competencia, la negación y la desconfianza, sólo queda el “poder del amor”.

Se incorpora en distintos grados la consciencia del si mismo y del otro, co-visto, co-existidos, co-validados, co- amados.

Siempre se percibe al otro como completo y perfecto, por lo tanto no se utilizan alguna parte o dimensión del otro para completarse y no se cae en la tentación de asumir que alguna parte o dimensión de uno podría completar en modo alguno al otro.

Dos amigos juntos es semejante a dos bailarines en una pista, donde el acoplamiento y la aceptación incondicional positiva del otro, construyen una realidad coreográfica cuya existencia es imposible en ellos por separado, es una danza única e irrepetible en cada instante que es, de modo que se vive con esa consciencia y gozo.

La amistad es entonces, una integración de dos diferencias no sólo co-aceptadas, sino que incorporadas como la sustancia fundamental de una relación,  que nutre en forma simultánea y recíproca la identidad y la intimidad de los amigos coexistentes.

En los centros educativos desde la más temprana edad debería enseñarse amistología, sobre todo porque es el mejor modo de aprender a conectarse con el prójimo y lo prójimo. Siendo este hábito fundamental,  el mejor modo de mantenerse sano y feliz.

La amistad no es sólo inteligencia interpersonal, no es sólo habilidades psicosociales, no son sólo factores protectores vinculares, no es sólo temer a la soledad, no es sólo tener a quién instrumentalmente recurrir, no es sólo un primer peldaño para subir otras escaleras relacionales, no es sólo un buen disfraz para operar con menos temor en los contextos con predominio de las pautas patriarcales.

La amistad es una hermosa puerta al alcance de todas las manos,  que nos permite ingresar a un lugar muy parecido al patio de nuestros juegos infantiles, que nos ayuda a ser lo que somos y a no confundirlo con lo que hacemos, tenemos o sabemos. Hace más fácil la liberación de nuestro niño interior, por muy domesticado y encerrado que se encuentre.

Es una puerta que nos permite el acceso a una coexistencialidad posible, a incorporarse al plan imprescindible y perfecto del amor, él que necesitamos como el aire para poder existir. Puede por ello afirmarse que el coexistir es lo que nos permite existir a la vez que el existir es lo que no hace accesible el coexistir. La amistad es entonces es el tipo de relación ecosistémica que nos facilita el  ser y el ser con otros. Es el modo más perfecto que la vida nos entrega para vivir la intimidad, con todo lo que somos, con la sombra y la máscara, sin quitar, sólo dando y recibiendo en este acto. Sin criticar, ni ver fealdad o maldad en el otro, tan sólo validando, entregando belleza y bondad en cada gesto y en cada trama del tejido del complexus coexistencial que los amigos co-construyen, como el entramado de un chaleco hecho por dos con lanas de dos colores, que no sólo sirve para cobijar y dar pertenencia e identidad a los dos amigos, permite de modo simultaneo que todo el planeta se vista y se abrigue con este nuevo y perfecto chaleco bicolor, y así cada nuevo encuentro de amigos le agrega otros dos colores y así sucesivamente hasta que cierto día el universo tenga un solo chaleco, de un solo color,  suma de la integración de todas la amistades.