30 de Enero del
2017
El Planeta de la
Esparanza 28
Visita a la
luna del Planeta y su bosque
El Árbol de la
vida 1
Inmenso, el árbol de la vida se volvió azul y
extendió sus ramas hasta
cubrir todo el bosque como un travieso antifaz.
Luego, achicó
su estatura hasta una buena escala
humana, con aspecto adolecente, su voz
se hizo próxima saludó a un
movimiento de rama a los visitantes del
planeta, no sin agregar en son de
broma beniga: planetóiogoss que
abandonan a sus vecinos luneros
Guiñando
ramas, se dirigió a Alicia diciendo
a ti te deben haber enseñado más sobre mí que todo lo que yo sé de mi
mismo Sin embargo te apusto que
no conoces estas fabulillas reducidas a
una mínima expresión que me endilgó un
chileno-
1. Modestia o inhibición ante el tiempo.
Dios no quiso que sus hijos comieran de este
segundo fruto, para que no fueran tan perfectos.
2. Freudiano
Dios pensó que con el primer Árbol, la
pareja humana ya tenía suficiente.
3. Apuro y Ambición
Adán, apresurado, mordió el tronco y tuvo
que salir huyendo del paraíso. Eva lo reprendió, diciendo si no podías coger el
fruto, deberías por lo menos haberte llevado el resto del paraíso.
4. Vanidad y sentido práctico
Dios colocó a los ángeles a la entrada del
paraíso con el fin de exhibir sus espadas ¾se estaban amohosando.
5. Telepatía
El matrimonio Adán y Eva llegó hasta el
árbol, pero encontró que alguien ya había comido el fruto,era la muerte.
6. Usura
Dios no quiso que Adán y Eva comieran el
fruto, porque no estaba seguro de si él lo necesitaría personalmente.
7. Maledicencia
Cuando se fueron Adán y Eva, Dios llamó a la
serpiente.
8. Fijación Mórbida
Adán y Eva no alcanzaron a reparar en el
segundo árbol, inmersos en el recuerdo del primero, cuando debieron alcanzar
las fronteras.
9. Favoritismo
El árbol de la vida
alcanzó vida eterna.
10. Hipermnesia
Dios manteniendo la
guardia armada el Paraíso algunos siglos después.
11. Angustia
Adán y Eva castigados por no tener un pájaro
amigo que les trajera el fruto del árbol, aunque fuera picoteado.
12. Ya visto
Sensación
de Prometeo, en el Caucaso, al conocer los fundamentos de la resolución que
sancionaba a Adán y Eva.