lunes, 28 de julio de 2014

La Dimensión Poética de la Vida (3)


La Dimensión Poética de la Vida (3)

Alicia , Antonio y sus amigos en el País de lo Poético(3)
 Mientras la Integración hacía un alto en la lectura  de un texto  que supuestamente podría  ayudar a que los viajeros entendieran bien en qué país estaban…  ellos se acercaron al mar y éste les habló de esta manera
Hola, amigas y amigos Me es difícil presentarme, pero tal vez  tenga sentido, en estos pagos de lo poético, recordar, estas palabras de Neruda, poeta que residió en la tierra

NECESITO del mar porque me enseña:
no sé si aprendo música o conciencia:
no sé si es ola sola o ser profundo
o sólo ronca voz o deslumbrante
suposición de peces y navíos.
El hecho es que hasta cuando estoy dormido
de algún modo magnético circulo
en la universidad del oleaje.
No son sólo las conchas trituradas
como si algún planeta tembloroso
participara paulatina muerte,
no, del fragmento reconstruyo el día,
de una racha de sal la estalactita
y de una cucharada el dios inmenso.

Lo que antes me enseñó lo guardo! Es aire,
incesante viento, agua y arena.

Parece poco para el hombre joven
que aquí llegó a vivir con sus incendios,
y sin embargo el pulso que subía
y bajaba a su abismo,
el frío del azul que crepitaba,
el desmoronamiento de la estrella,
el tierno desplegarse de la ola
despilfarrando nieve con la espuma,
el poder quieto, allí, determinado
como un trono de piedra en lo profundo,
substituyó el recinto en que crecían
tristeza terca, amontonando olvido,
y cambió bruscamente mi existencia:
di mi adhesión al puro movimiento.


Las y los visitantes quedaron pensativos  y luego aplaudieron siguiendo el rumor de las olas, como bailando con ellas
 Gracias, dijo Antonio, otro día podríamos compartir  el Monumento al Mar de Vicente Huidobro.