miércoles, 24 de julio de 2013

Conversando desde la Amistad(249)


Conversando desde la Amistad(249)

Las Palabras
Las palabras  forman parte de lo  profundo  de lo humano,  e integran  las   propuestas, añoranzas y realizaciones en el
camino del cambio cultural y el desarrollo personal
  Eso se puede  decir … con entusiasmo y convicción,  ante la palabra  poética de  Iris Leal
                             DECIR
                                                Iris Leal

Un sonido ha formado una palabra, le ha puesto un decoro que vibra en el alma. Atraviesa las vastedades de los mundos y resuena para escucharse. ¿Qué dice? Conoce las cosas y las abraza, recolecta tesoros en canastos de mimbre y hace oraciones, versos, rezos, cantos, conversaciones que levantan los verbos hasta hacerlos realidad, nombra. La palabra se dona entera, desde su esencial textura, hasta su piel más tersa, se dona virgen a la voz. Las palabras se dibujan en el mundo, pero tal vez no pertenecen a él, se toman y se crean con las manos, los actos, los objetos, las cartas, los acuerdos al descubrir una nueva forma de entender algo. Es como si defendieran el vuelo y la eternidad, y si han caído algunas, degradadas sufren su desafinada significación hasta perder la boca de alguien y así morir en la despronunciación, desligadas de su tonalidad.
 La primera experiencia de vida, ese instante fuera de lo recordado, cuando el líquido amor se hizo aire, necesitó de tanto oído para nacer. Vivió en silencio, dentro de él, impregnado de los tonos que sólo en él convergen, encontrándose con cuánto es frente a él y por su animoso sentir descubrió fragmentos de todo. Dulces hebras que hilvanaban a su ser, matices que llamaban y pudo su cuerpo decir y comenzó del fundamento. Conquistó la primera unión de lo tocado y lo sentido y pronunció un sonido que hizo coro en el mundo, con los otros en el mundo. 
La palabra habla otorgando valor y misterio, comprensión en un sentido íntimo, esculpe la sensación, la emoción, lo que jamás deja de moverse dentro de lo que somos, alumbra. Acaricia ideas, intenciones, misiones, recuerdos, la palabra se va escribiendo en nosotros. Amarillentos libros atesoran su valor, pues la sabiduría la ha hecho orífice de nuestros pechos abiertos. 
¿Qué dice nuestro pálpito, nuestro corazón? Decir pronunciando lenta y amablemente, dándole el silencio necesario para su creación...¿Qué dice?

La palabra une a distancias que el alma recién está vislumbrando.