La
Dimensión Poética de la Vida(7)
Alicia Antonio y sus amigos en el País de lo Poético (4)
Poemas sobre el Mar (2)
La Integración carraspeó e
interrumpió sonriendo la
lectura , momento en que el conejo blanco aprovechó para sugerirle que fueran nuevamente al mar.
-Se llevarán una
sorpresa…se oyó decir al azul, como hablando para sí.
Ya en la arena, casi
escuchando el júbilo del mar
avanzando arena adentro ,
contemplando a la distancia el erguirse de una ola inmensa que
parecía dar la bienvenida , la imaginación cerró los ojos y al poco rato se sintió,
clara la voz de un delfín,
diciendo - aquí está nuestro auto
marino, perdón, es ecológico, lo movemos nosotros mismos…
Se acercaron a la orilla. Allí estaba un auto de madera, my bien tallado,
flotante , guiado por dos delfinas y dos delfínes. Los cuatro movía aletas en
son de saludo , mientras , por un
puente plegable iban a embarcarse las y los miembros del grupo, constatando,
con agrado, el contar con asientos asignados ,
conformados para satisfacer la
comodidad, el bienestar de todas y todos, El más pequeño y apto para estar
tendido era el de la lagartija,
mientras los de los dos
gato tenían dos pisos conectados por una barra - No voy a andar, por esos lados ,dijo, sonriendo ,la rata.
La Integración y el Asombro
partieron con ellos . Establecieron una animada charla con los delfines . A
poco navegar, llegaron a una isla. Una bandera decía Altazor. Se bajaron del auto-nave y fueron leyendo en las rocas el poema Monumento
al Mar de Vicente Huidobro
MONUMENTO AL MAR
Paz
sobre la constelación cantante de las aguas
Entrechocadas
como los hombros de la multitud
Paz sobre
la lápida de los naufragios
Paz sobre
los tambores del orgullo y las pupilas tenebrosas
Y si yo
soy el traductor de las olas
Paz
también sobre mí.
He aquí el molde lleno de trizaduras del destino
El molde
de la venganza
Con sus
frases iracundas despegándose de los labios
He aquí
el molde lleno de gracia
Cuando
eres dulce y estás allí hipnotizado por las estrellas
He aquí
la muerte inagotable desde el principio del mundo
Porque
un día nadie se paseará por el tiempo
Nadie a
lo largo del tiempo empedrado de planetas difuntos
Este es el mar
El mar
con sus olas propias
Con sus
propios sentidos
El mar
tratando de romper sus cadenas
Queriendo
imitar la eternidad
Queriendo
ser pulmón o neblina de pájaros en pena
O el
jardín de los astros que pesan en el cielo
Sobre las
tinieblas que arrastramos
O que
acaso nos arrastran
Cuando
vuelan de repente todas las palomas de la luna
Y se hace
más oscuro que las encrucijadas de la muerte
El mar entra en la carroza de la noche
Y se
aleja hacia el misterio de sus parajes profundos
Se oye
apenas el ruido de las ruedas
Y el ala
de los astros que penan en el cielo
Este es
el mar
Saludando
allá lejos la eternidad
Saludando
a los astros olvidados
Y a las
estrellas conocidas.
Este es
el mar que se despierta como el llanto de un niño
El mar
abriendo los ojos y buscando el sol con sus pequeñas manos temblorosas
El mar
empujando las olas
Sus olas
que barajan los destinos
Levántate y saluda el amor de los hombres
Escucha
nuestras risas y también nuestro llanto
Escucha
los pasos de millones de esclavos
Escucha
la protesta interminable
De esa
angustia que se llama hombre
Escucha
el dolor milenario de los pechos de carne
Y la
esperanza que renace de sus propias cenizas cada día.
También
nosotros te escuchamos
Rumiando
tantos astros atrapados en tus redes
Rumiando
eternamente los siglos naufragados
También
nosotros te escuchamos
Cuando
te revuelcas en tu lecho de dolor
Cuando
tus gladiadores se baten entre sí
Cuando
tu cólera hace estallar los meridianos
O bien
cuando te agitas como un gran mercado en fiesta
O bien
cuando maldices a los hombres
O te
haces el dormido
Tembloroso
en tu gran telaraña esperando la presa
Lloras
sin saber por qué lloras
Y
nosotros lloramos creyendo saber por qué lloramos
Sufres
sufres como sufren los hombres
Que oiga rechinar
tus dientes en la noche
Y te
revuelques en tu lecho
Que el
insomnio no te deje calmar tus sufrimientos
Que los
niños apedreen tus ventanas
Que te
arranquen el pelo
Tose
tose revienta en sangre tus pulmones
Que tus
resortes enmohezcan
Y te veas
pisoteado como césped de tumba
….
En eso se
oyó decir al mar : Vicente,
siempre tan creativo y mago siguió
el poema en otro
tono.Vuelvan mañana .Mañana, estará él o Altazor
Los cuatro
delfines saludaron , diciendo al unísono --Hola, está listo el puente plegable y varios pescados irán conversando con
ustedes por el camino.