jueves, 23 de agosto de 2012

Conversando sobre la Amistad (324)


Conversando sobre la Amistad (324)
La poesía como puente amistoso entre la vida y la muerte
La sensibilidad, la imaginación y el manejo del lenguaje del poeta  chileno Alberto Rubio humanizan  el tránsito  final de una abuela

La Abuela,
 Alberto Rubio
Se puso tan mañosa al alba fría,

la cerrada de puertas, la absoluta de espaldas,

cosiéndose un pañuelo que nadie conocía.

Se bajó bien los párpados. Con infinita llave

los cerró para siempre. Unos negros marinos

vinieron a embarcarla en una negra nave.


Y la nave, de mástiles de espermas y de velas

de coronas moradas de flores, era el barco

que lleva a extraños puertos a las hondas abuelas.

No hizo caso a nadie: ni a la hija mayor,

ni a su eterno rosario: tan mañosa se puso,

tan abuela recóndita metióse en su labor.


Ni el oleaje de rostros, ni la llántea resaca

pueden ahora atraer su nave hasta esta costa:

¡ni nadie de su extraño pañuelo ahora la saca!