Conversando desde la
Amistad(209)
Salud y esporitualidad
Conversación: “Medicina, Espiritualidad y Salud”
en Las Coincidencias de Isla Negra
junio 2013
Por Sebastián Fuentes Hülse
Médico
y Residente de Medicina Familiar de la Universidad de Valparaíso
Srgunda parte
Mi definición personal de espiritualidad es:
Dimensión de la vida que incluye y trasciende la
dimensión de la mente, generando consciencia, sentido y vínculos, e impregnando
por completo la experiencia humana
Así como en la cosmovisión oriental, pongo el foco en
la trascendencia de la mente. También me centro en la consciencia y el sentido,
dos aspectos que considero tienen lugar tanto en la dimensión mental como en la
dimensión trascendente o espiritual. Junto con lo anterior, concibo al ser
humano como una unidad indivisible respecto de sí mismo y del universo que lo
rodea, por esta razón creo en una división meramente conceptual de las
dimensiones espiritual, mental, social, física… También hago el énfasis en la
experiencia, por sobre el de la creencia. Mi consciencia me empuja a percibir
la mente, la lógica, el lenguaje y las palabras como subsistemas dentro de la
experiencia o vivencia que los alberga, de esta manera sitúo a la
espiritualidad dentro de la mente humana pero extendiéndose fuera de ella hacia
un universo inconmensurable e incierto. Así, llego a la conclusión de que lo
espiritual es, en definitiva, una cuestión colmada de incertidumbre a los ojos
de la razón humana. Esta incertidumbre que aflora e inunda la razón ante
interrogantes o aspectos existenciales es la que, a mi juicio, empuja al ser
humano a desarrollar otras formas de percibir y de ser consciente. De esta
manera entiendo el por qué lo espiritual se relaciona tan íntimamente con las
emociones, la intuición, los sentidos corporales o lo sensorial, lo vivencial,
el silencio, el vínculo genuino con el otro, con la naturaleza, el arte, en
fin, distintas manifestaciones de un universo no verbal. La experiencia de la
consciencia y el sentido, son para mí, la clave para comprender la compleja e
indeterminada relación entre la mente y lo espiritual.
El sentido, aquello que experimentamos como una
claridad, una confianza, una fuerza y como “lo que debe ser”, tendría lugar
desde nuestra moralidad personal extendiéndose en coherencia hacia el resto de
nuestro ser, fundiéndose con lo espiritual. Junto con esto el desarrollo de un
vínculo o conexión consigo mismo, los otros y la naturaleza sería inherente a
la experiencia espiritual, toda vez que traduce la inevitable expresión que
necesitamos hacer de esta profunda vivencia. La consciencia, por otra parte,
tendría su origen en la relación con la unidad universal, al ser una forma de
conexión con el todo. La consciencia sería, para mí, una manera de percibir, un
darse cuenta y comunicarse con todo lo que existe, en cuyo proceso quedaría
desdibujada la individualidad personal.

TODO/UNIVERSO/DIOS



sensorial
la naturaleza



vínculos
los otros
Finalmente veo una espiritualidad que puede, en un
diálogo como este, comenzar con conceptos, análisis, abstracciones y
sensaciones, para luego extraviarse en la experiencia y en la ausencia de las
palabras.
¿Cómo
desarrollo/vivo mi espiritualidad?
Grupos:
En
cada acción
A
través de caminos experienciales
En
el arte
En
la conexión emocional
Cultivando
la empatía
En
la comunicación
Siendo
coherente con mi esencia
Desarrollando
el mundo interno
Meditando
Reflexionando
Pensamiento,
sentimiento y voluntad son caminos para acceder a lo espiritual
En
el camino religioso
Siendo
consciente de uno y los otros
Viviendo
conscientemente
Encontrando
sentido
Viendo
lo poético
En
la creatividad