El
Desaliento
Por alguna razón, para mí desconocida ,algunos diccionarios, al
definir el desaliento , aluden a un”
embarazo del aliento.”
En las conversaciones de quienes
desean y trabajan por cambios en el sentido común, por los derechos y
responsabilidades humanas ,por la
mirada ecológica a la vida, por
la salud integral, se suele percibir y
expresar la vivencia de dolor, de frutración, a veces de desfallecimiento ante el curso de los acontecimientos socio ciulturales en Chie y en el mundo.
No
avanzamos. Estamos nostálgicos .Aflora un comprensible desánimo.
Sin embargo , debajo del cual,por el tono de voz, por las miradas ,se
advierten , pequeñas, humeantes, brasas de esperanza y , allí y allá , el
inicio de una visión más amplia, efectivamente, como un embarazo … de conciencia, un acercarse a un nuevo aliento, el que se apoya en la confianza y pone el sentido y la
resiliencia frente al malestar en la
cultura como baluartes no transables
ante el espejismo de poner en primer plano el trinfo inmediato, el éxito a corto plazo.
La recuperación del ánimo,del
aliento , ese embarazo en otra dimensión, viene del constatar como como crece la
decepción ante la política tóxica y de
de pocos alcances y empieza a extenderse la opción por cambios de
fondo , por una politica del ser humano , conciente
de nuestra complejidad , atenta a
las necesidades y capacidades de todas y
todos,integrada a la naturaleza, conciente del ser.
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