miércoles, 15 de mayo de 2019

El Árbol 54


 El  Árbol 54

Elicura Chihuailaf

PARA SANARTE VINE, ME HABLÓ EL CANELO 

Para sanarte vine, me habló el árbol sagrado
Ve y recoge mis hojas, mis semillas
          me está diciendo
De todas partes vinieron tus buenas machi
          mis buenos machi
desde las cuatro tierras, desde las cuatro aguas
mediaremos, me están diciendo sus poderes
en tus nervios, en tus huesos, en tus venas
¿O deseas acaso abandonar a nuestra gente?
Elevaré mis rogativas, le digo
Ay, mis pensamientos se apartaron
          de los apacibles ríos de mi corazón

Piedra transparente será éste, por mí, dijiste
Oo Ngvnechen, envíame tu aliento
tu resollar de aire poderoso
Este va a ser cantor, dijiste, entregándome
          el caballo azul de la palabra
Hasta la tierra de arriba llegará en sus sueños
confundiendo al mensajero de sus enemigos
Me oirá cuando hable desde la savia
de las plantas y de las flores. Así dijiste

Mas yo quise olvidar el consejo de las Ancianas
          y de los Ancianos
por eso estoy enfermo ahora
Mis pensamientos se alejaron
          de los apacibles ríos de tu corazón

Mírame, estoy soñando que he subido
          por tus hojas
La cascada azul de la mañana vino a mojar
          mis labios con sus aguas
Subí, subí con ellas, pero me sujetó
          el murmullo de los peces
Caminé luego sobre el aroma de los bosques
Después baile. En él estaba colgado mi poder
Las buenas visiones y los buenos sueños
          lo rodeaban
Lloré entonces, lloré, abrazado
          por el espíritu de mi canelo.