El Árbol 27
La Poeta y el Árbol
Ella sintió la paz
del árbol.
Ese aliento
suave detrás del hervor de los naranjos,
de la historia fantástica del manzano, de la seriedad del pino, de la cara sonriente del aromo.
Ese anhelo de la
vida de
facilitar la misión de la tierra
con flores y frutos, con hojas y ramas y troncos y sombras y raíces.
Ese sueño del aire y
el agua al poner sus iniciales en las cortezas más comunicantes.
Ella sintió esa
paz del árbol.
El árbol la miró ,
comprensivo, pretendiendo ignorar que
ella lo condujo hacia la poesía.
luchow