Entre la
Separación y la Integración 66
Los grandes
referentes
La racionalidad
integradora
El perdón 3
Una imaginería
Hemos estado
alternando entre destacar, por partes ,
la revista Co Incidir y mantener la senda
por la llamada racionalidad integradora,
que debiera llamase racionalidad integradora separadora, la gran matriz del tema de navegar en el “entre” de la separación y la integración.
En este ámbito,
nos hemos abocado al tema del perdón.
Gracias,
hola, buenos días, perdón…Términos
infaltables.
Nuestra nota
anterior versó sobre algunas reflexiones
en relación al perdón.
Ahora, nos
internaremos en un terreno más cerca de la imaginación, la intuición, los
afectos, lo estético .Más cómplice del hemisferio cerebral derecho. Veremos una
imaginería.
Cerremos los
ojos.
Respiremos por
la nariz, subiendo el abdomen y el
aire con la inspiración, bajándolos , muy lentamente con
la espiración.
La boca cerrada
la lengua apoyada en el labio inferior.
Vamos sintiendo
peso en los pies,
en los tobillos,
en las piernas
hasta las rodillas,
en los muslos,
en los
genitales,
en las nalgas
en la espalda
en el abdomen
en el tórax
en las manos
en las muñecas.
en los
antebrazos
en los codos
en los brazos
en los hombros
en el cuello
en los párpados
en la boca
Aprecia cómo
sientes tu cuerpo
tu estado de
ánimo
tu relación con
lo más tuyo de ti mismo…
Prepárate para abrirte
a otra realidad, como quién encuentra ,la forma de pasar una alambrada electrificada.
Está sobre una
piragua, navegando por un río.
Es la hora del
crepúsculo.
El cielo está de un color poco usual, verde
E l río fluye
,suave, seguro, en la superficie alternan el matiz verde del cielo con el de las hojas que
han caído o se reflejan en sus aguas.
En ese momento
lo vió: largo, rápido, los mucho dientes insinuándose en una boca entreabierta, se le acercaba un cocodrilo.
El corazón le
latía como nunca lo había hecho. Sentía un gran vacío en el que zumbaba,
literalmente zumbaba una pregunta : tendría sentido intentar golpearlo
con el remo en los ojos.
El cocodrilo se
le adelantó. No no podía ser… le guiño
un ojo y…ya en lo increíble… le sonrió.
Se calmó el
horror se descoloreó, pasó sin mediaciones al asombro…
Entonces,
escuchó una voz de un tono extraño.
Pensó en estar
ante un ser extraterrestre, por lo menos
era extrahumano…Sin embargo ,
hablaba como un humano… y le decía: ten
tranquilidad, “sé lo que te pasa, conversemos…”
No pudo
menos que adaptarse
a la situación y contestar al cocodrilo: “¿Qué sabes …quien ere tú…?”
El cocodrilo volvió a
sonreír.” Vamos por parte. Sé que estás muy herida porque tu hijo de 12 años no te quiso ayudar a escribir tu proyecto , tan querido, en Internet. Te
desscalificó . Fue tremendamente ingrato. Duro .Ajeno. ¿Qué es eso de
decirte vieja dedícate a lo tuyo. No vas a aprender y me quieres
quitar mi tiempo …”
Ella dudó de estar en sus cabales, de estar despierta. Le bajó el deseo de
comunicarse con el cocodrilo…nunca lo pensó : un amigo, un posible terapeuta ,alguien con dotes paranormales… y cocodrilo.
Ël . pareció
contestar a lo que no alcanzó a pensar:
“Ven detrás mío
, iremos a un lado en que podremos
escucharnos, concentrarnos , comunicarnos…”
LLegaron a una
pequeña playa de río. La arena, blanca, hasta lo amistoso, muy suave. Alrededor
, unos árboles cargados de…lo inaudito ,de unas enormes frutillas.
Ella descendió
de la piragua. “Déjala suelta ,no se irá”, dijo el cocodrilo, en tono seguro,
casi profesoral.
Ella se
sentó en la arena, cómoda, confiada
,expectante.
Él se
colocó lo más cerca posible, todo su ser en el agua, menos
la cabeza de la boca hacia arriba.
“Bueno, cuenta
algo sobre ti “, dijo ella, sintiendo que fluía como la más libre de las
piraguas.
“Seré breve,”dijo
él.” Los seres humanos no resisten demasiada luz. Soy parte de ti, parte de tu
vida. Cada humano tiene su vida. Yo represento lo peligroso, pero trabajo junto
con el amigo delfín, representante de lo amigable. Somos separados y somos integrados, él juega, es amistoso. Yo amenazo, con lo que
ayudo a que las personas crezcan.
Teniéndome
cerca, ya sabes algo de lo que son los grandes riesgos de la vida , Soy una metáfora, si me conoces, estás propensa a perdonar a la vida su incompletud, sus pérdidas,
sus frustraciones sus
complejidades , sus incertidumbres
Perdonar es
abrir puertas .
Es ayudar a
cambiar la vida.”
Esta vez ,ella
sonrió. Mientras observaba que su nuevo amigo se transformaba en un delfín.
“Tranquila,”
dijo el delfín, con la misma voz del cocodrilo. Tu te subes sobre mí y llevamos la piragua moviéndose
adelante con mi respiración.
El trayecto fue muy alegre .El río se contagió y hasta hacía olitas. El delfín daba saltos y ella o sentía la menor inseguridad. -.
¿“Debo perdonar”,?
preguntó ella
Si ,pero en algo a ti misma. Es un perdón a la vida y
tú eres parte de la vida .
La vida
amplia que ti ene el río, la playa ,las frutillas , los guiños las sonrisas, el gran regalo de existir,… del misterio De la magia.
Sin embargo , esta vida misterios y mágica, no es
completa,.
No está en lo
absoluto… y hay cocodrilos peligrosos y hay hijos
ingratos o, si lo quieres , poco cuidadosos en sus relaciones y delfines que
juegan y no se dedican ….”
“¿A la telepatía?” Preguntó ella, mientras
agradecía una frutilla ,casi del porte de la boca del cocodrilo ,que apareció en el cuello del
delfín.