viernes, 26 de septiembre de 2014

La Dimensión Poética de la Vida (63)


La Dimensión Poética de la Vida (63)
Alicia, Antonio y  sus amigos en el país de  lo Poético

Lo  Poético en la Silla Tibia, juego a la verdad

Yo puedo hacerte una pregunta,  inquirió Alicia, dirigiéndose al Asombro.
En preguntar  no hay problema, es , en parte , lo mío, respondió el Asombro, aparentemente halagado.
Es si a ti no te parece contradictorio eso   de que se constituya un ·país “ de lo poético  Es como sí…habláramos del país de las maravillas, replicó  el Asombro, con un tono afectuoso
Sí, continuó Alicia, sin vacilar, también en ese caso, Antonio insistiría en que lo esencial es invisible  a los ojos y, naturalmente  no se puede nombrar, un país es algo  con fronteras, prosaico…
 Mira Alicia , dijo el Asombro:  País es una palabra para lo ”familiar ,no para  el mundo de los símbolos, los arquetipos… Tellier  se movía en ”el país del  Nunca  Jamás”…la poesía intenta cambiar el mundo, cambiar la vida , dijo  Rimbaud.. Shelley había sido más  definido, expresó en “En Defensa de la Poesía” que “los poetas son los  verdaderos legisladores de la Humanidad”
Escucha en el Observatorio Ontológico lo que está transmitiendo Frances,  unos Estatutos  del Hombre  sugeridos por un  gran poeta brasilero




LOS ESTATUTOS DEL HOMBRE
Thiago de Mello
A Carlos Heitor Cony


ARTÍCULO I.              Queda decretado que ahora vale la verdad,
            que ahora vale la vida,
            y que, tomándonos las manos,
            todos trabajaremos por la vida verdadera.

ARTÍCULO II.            Queda decretado que todos los días de la semana,
            incluso los martes más cenicientos,
            tienen derecho a convertirse en mañanas de domingo.

ARTÍCULO III.            Queda decretado que, a partir de este momento,
            habrá girasoles en todas las ventanas,
            que los girasoles tendrán derecho
            a abrirse dentro de la sombra,
            y que las ventanas deberán permanecer, todo el día,
            abiertas hacia el verde donde crece la esperanza.

ARTÍCULO IV.             Queda decretado que el hombre
            nunca más necesitará dudar del hombre.
            Que el hombre confiará en el hombre
            como la palmera confía en el viento,
            como el viento confía en el aire,
            como el aire confía en el espacio azul del cielo.

PARÁGRAFO            El hombre confiará en el hombre
ÚNICO            como un niño confía en otro niño.

ARTÍCULO V.            Queda decretado que los hombres
            están libres del zumo de la mentira.
            Nunca más será necesario usar
            la coraza del silencio ni la armadura de palabras.
            El hombre se sentará a la mesa
            con su mirada limpia
            porque la verdad se servirá
            antes del postre.

ARTÍCULO VI.            Queda establecida, durante los siglos que dure la vida,
            la práctica soñada por el profeta Isaías,
            y el lobo y el cordero pastarán juntos
            y la comida de ambos gustará como la aurora.

ARTÍCULO VII.            Por decreto irrevocable queda establecido
            el reinado permanente de la justicia y de la claridad,
            y la alegría será una bandera generosa
            para siempre desplegada en el alma del pueblo.

ARTÍCULO VIII.            Queda decretado que el mayor dolor
            siempre fue y será siempre
            no poder dar amor a quien se ama,
            sabiendo que es el agua
            quien ofrece a la planta el milagro de la flor.

ARTÍCULO IX.            Queda permitido que el pan de cada día
            tenga en el hombre la señal de su sudor.
            Pero que, sobre todo, tenga siempre
            el caliente sabor de la ternura.

ARTÍCULO X.            Queda permitido a cualquier persona,
            a cualquier hora de la vida,
            el uso del traje blanco.

ARTÍCULO XI.            Queda decretado, por definición,
            que el hombre es una animal que ama
            y que por eso es bello,
            mucho más bello que la estrella de la mañana.

ARTÍCULO XII            Se decreta que nada será obligado ni prohibido.
            Todo será permitido,
            incluso jugar con los rinocerontes
            y pasear al atardecer
            con una inmensa begonia en la solapa.

PARÁGRAFO            Solo se prohíbe una cosa:
ÚNICO            amar sin amor

ARTÍCULO XIII            Queda decretado que el dinero
            nunca más podrá comprar
            el sol de las mañana venideras.
            Expulsado del gran baúl del miedo,
            el dinero se transformará en una espada fraternal
            para defender el derecho de cantar
            en la fiesta del día que llegó.

ARTÍCULO             Queda prohibido usar la palabra libertad,
            la cual será suprimida de los diccionarios
            y de la ciénaga engañosa de las bocas.
            A partir de este instante
            la libertad será algo vivo y transparente,
            como un fuego o un río,
            y su hogar siempre será
            el corazón del hombre.



Todo  se relaciona con todo, dijo Atenea; la realidad trae vivencias , ellas retransforman en poesía, dentro y fuera de los poemas  y ella  da a luz, semilla   modos de ser , de nombrar, de construir, ampliación de la realidad, donde , entre muchos regalos, emergen países,  propuestas de  relación entre los humanos y de ellos  con la naturaleza y con el ser…