jueves, 29 de enero de 2015

El Ar te de Vivir 87


El Arte de Vivir  87
 Desde la perspectiva del arte de vivir, el sentido, la búsqueda de sentido es un norte , una orientación básica. En esa navegación por la  vida, acechan los obstáculos, las amenazas, las seducciones   de lo trivial y de la exaltación, radicales, respectivamente,  del  individualismo superficial y del fundamentalismo.
El mito de Midas es un verdadero paradigma de
la trivialidad, como lo es, en las fábulas la gallina de los huevos de oro
El mito de Icaro es muy representativo de la exaltación, tal como lo advierten los mitos  griegos
En la frivolidad no mostramos el coraje de actualizar nuestra condición humana. Actuamos como si no existieran los otros, la opción de  desarrollarse, el misterio de la existencia. Puestos en la exaltación, no asumimos nuestros límites , obviamos los procesos, creemos poder  superar la incertidumbre  a través de un estado   vivencial de plenitud, de una auto imagen de  gran relevancia, de omnipotencia.
Situémonos  a Dédalo e Ícaro saliendo del  laberinto.   Dédalo  a advertido a su hijo que no  debe volar muy cerca del agua  ni acercarse al sol .
Ïcaro empieza a elevarse, deja atrás la  advertencia, es el placer    de la transgresión, es la euforia del desafío. Es una especial plenitud del yo
…Así, Ícaro se acercó al sol, volando con sus alas  de plumas sujetas con cera .
 Su padre, Dédalo , se lo había advertido, antes que abandonaran el laberinto:” no vueles muy alto , porque el calor del sol  te  va a derretir las alas; si vuelas muy bajo, cerca del mar, se te van a humedecer.” Mientras lo decía, por alguna razón se le   habían humedecido  los ojos.
Dédalo iba adelante, señalando el  camino. De súbito siente un grito desgarrados. Se da vuelta  y alcanza a ver  a su  hijo   hundiéndose en  el mar.
En la orilla comentan  unos pescadores : “iban volando como pájaros,  parecían dioses, pero..”
Dédalo ve con cierto alivio  que llega Hércules , entra, decidido, al mar , se zambulle  y  vuelve a la superficie con el cadáver  de su hijo. Lo entierran. Hércules aconseja a Dédalo:” Minos  te está siguiendo, no  te  detengas…  Es tiempo  de que tomes en cuenta el cuidado. Cuidado ante la exaltación. Mira la serie: tu exaltación va nidosa te hizo   lanzar  al vacío a tu sobrino  notable  inventor , tu exaltación te llevó  a apresurar  esta huida sin preparar bien a tu hijo…la exaltación  celosa de la mujer de mi padre Zeus  me tiene haciendo trabajos absurdos…” pero ya  Dédalo no escuchaba y  extendía sus alas , pronto al vuelo.
Un pescador comenta: “Yo sueño  muchas veces que vuelo... Es un sueño  repetido Como si me dijera algo. Lo que tengo claro  es que soy persona y no puedo volar…” “ Aunque te vuelas  hablando de tu hija”, le replicó ,afectuosamente,  un compañero.
…. En eso
Abandonada por Teseo en la isla de Naxos, Ariadna soñaba con Dédalo  e Ícaro. Falta un hilo entre ellos, pensó al despertar , todavía  sin notar la  ausencia de Teseo y de su  hermana. En eso, llegó Dionisos, el gran exaltado. Miró a  Ariadna y entendió que toda su vida  cambiaba desde ese instante.. Sintió un gran vínculo. Era como si naciera  de nuevo. Como si el hilo  de  Ariadna  hubiese adquirido vuelo. Tenía coraje de ser dando sentido a su exaltación