viernes, 2 de diciembre de 2016

Formación 45

 Formación  45
Síntesis

No sé si has llegado hasta aquí. Te propongo que consideres esta lectura como una invitación a que revises tu proyecto de vida, cómo te ves a ti mismo, a tu relación con la vida, cómo te conoces, hacia dónde encauzas lo que te queda por vivir. Te he señalado, un posible camino, desde el asombro, desde el nuevo paradigma, desde la salud integral, desde la ecología de yo.

Te invito a mirar tu propio camino, tu cotidianidad, tus metas, tus formas de perfeccionarte, tus disciplinas.

Enlazando la formación con el trabajo comunitario en la dirección de un desarrollo saludable, sugerimos que reflexiones y converses sobre la relación entre salud integral  y cambio cultural


LA SALUD INTEGRAL COMO UNA FORMA DE HACER POLITICA A LA ESCALA HUMANA

Al interés por la política de salud, se agrega, cada vez con más fuerza, la demanda de asumir la temática de la salud de la política. Política de salud que se identifica progresivamente con las preocupaciones por la calidad de vida. Salud de una política enferma de inanición, de sequedad, de distancia de la participación ciudadana, de imbricación desenfadada con el mercado, la manipulación de la opinión pública, la corrupción.

Las nociones convencionales de salud y de política se hacen estrechas. La vida con toda su complejidad, los avatares de la evolución, la presencia de un mundo globalizado y de la especie humana en extrema tensión por la emergencia del fundamentalismo y las patologías de la modernidad, hacen imperativa la búsqueda de nuevos referentes.

Hay sed de orientaciones, de sentido, en la riqueza prodigiosa de los avances científico‑técnicos y el malestar en la convivencia y la falta de profundidad en el hacerse cargo de la condición humana, la pobreza en vínculos con el sí mismo, con los otros significativos, con la vida comunitaria, con la dirección del desarrollo, con la naturaleza, con la trascendencia.

La cultura y los desarrollos personales están en un desasosiego, en una crisis de dirección.

Hay pocos terrenos de consenso. Uno de ellos es el de la salud.
Las exigencias de la salud pública y la politización de grandes temas de salud como las drogas, la violencia, la soledad, la desconfianza, la marginación, el hambre, el género, el ambiente, van conduciendo a una utopía tan fuerte como la del amor o la de la amistad, la utopía de la salud.