Conversando sobre la Amistad (312)

Conversando sobre la Amistad(312)

 Una relación compleja, un destino trágico: Anfios y Zeto, los díóscuros de Tebas

Los gemelos Anfios y Zeto eran hijos de Zeus y de una mortal , Actión,  hija del rey  Nicteo. Este  padre , severo, edípico y patriarcal, no aceptó el  embarazo extra conyugal de su hija . Ella abandonó su hogar y fue  a refugiarse donde el rey Epopeo,

Nicteo emprendió la guerra contra  el protector de su hija, Próximo a morir en la batalla decisiva,  empecinado, encomendó a su  hermanos Lico  que se llevara a  Antíope en cautiverio

Los gemelos Anfois y Zeto abandonados por orden de Lico, fueron recogidos  y cuidados por un pastor  bondadoso

 Los gemelos eran unidos, pero, a diferencia de  Cástor y Pondeuceus, tenían un modo de ser muy  muy diferente Zeto era fuerte,  sujeto de acción,    destacado como eximio cazador. Anfios era poeta , con fuertes  inclinaciones a la música- Enterado el dios  Hermes, el comunicador, el inventor de la lira, le facilitó, por un tiempo, su propia lira, de cuatro  cuerdas. Cuando constató  que Anfión   la habia convertida en un instrumento de  siete cuerdas, gustoso, admirado, se la regaló

Antíope vivió largos años separada de sus hijos,  presa, sometida a las torturas de Dirce, la esposa de Nicteo. En una ocasión, con la venia de Zeus, pudo escapar. En el camino, se encontró con sus hijos  que en el momento no   se orientaron a cerca de quien era  esta  fugitiva, víctima  de tanta desventura

Cuando se les hizo la luz , la buscaron , la encontraron en un sangriento festival dionisíaco en que  su madre , agonizante, estaba  atada  a un toro. La liberaron , sin  poder reavivarla. Luego, hicieron justicia    poniendo en su lugar a la malvada Dirce. 

Acto seguido,  fueron a castillo de Nicteo, dieron cuenta del rey, su tío abuelo. La  muchedumbre,  fascinada  con los jóvenes, los proclamo reyes de su ciudad, entonces  una pequeña   aldea que  todavía no llevaba el nombre de Tebas.

Los hermanos, imbuídos  del sentido del riesgo, del otro que acecha, enemigo, convencieron a los  habitantes  que debían  edificar un gran muro para  proteger la ciudad.  Allí trabajaban  los gemelos  junto a su pueblo, pero  con metodologías diferentes . Zeto, el vital,  movía  enormes piedras  sin aparentar cansancio alguno. Anfión  hacía  su parte    tocando la lira. La dulzura del sonido movía las piedras que  se ordenaban  solas ,unas sobre las  otra sin la menor  vacilación 

Por desgracia, artista al fín, Anfión  se desenvolvía mejor con  el arte de la música que  en el arte de  vivir, Se casó con Níobe, hija de Tántalo,  el humano que quiso   engañar a los dioses y sufre, a consecuencia, un suplicio eterno. Níobe  heredó la soberbia de su padre. Tuvo  siete hijas y siete hijos. Orgullosa,  corta de alcances , se  burló de  Latona, madre de Apolo y Artemisa quien sólo  tuvo  esos dos hijos,  Artemisa y Apolo, dos , pero  bien notables  y poderosos cada uno de ellos . Sin sentido de las proporciones,  los  hijos de Latona  mataron a los catorce hijos de Niobe y Anfión

 Destrozado, Anfión  se quitó la vida, Su padre Zeus  no intervino.  Fue como una constelación familiar de tragedias: Tántalo, Actión, Anfión , Niobe y sus hijos.

Tebas lleva el nombre de la esposa de Zeto, Tebaida, un ser pequeño, de celos con su cuñada, pero incapaz de hacer sus   expresiones de soberbia

 Anfión vivió la tragedia de su madre y la suya   propia. Sin embargo, contribuyó  a la amistad que se mantiene desde el fondo de los tiempos con la lírica, con lo lírico.